Ubicado en las tranquilas orillas del Lago Paravani en la región de Samtskhe-Javakheti, el Monasterio de Poka San Nino se erige como un testimonio de la rica herencia cristiana de Georgia. La leyenda dice que Santa Nino, la mujer acreditada con la introducción del cristianismo en Georgia, descansó aquí durante dos noches en su arduo viaje desde Capadocia a Mtskheta.
Fue en este sereno lugar donde Santa Nino experimentó una profunda visión. Se encontró con un hombre radiante que le ordenó entregar un documento con el sello del Salvador al Rey en Mtskheta. Después de ofrecer oraciones a la Santa Virgen, Santa Nino continuó su viaje, su camino grabado para siempre en la historia espiritual georgiana.
El Monasterio de Poka San Nino, un pequeño pero artísticamente significativo monumento de la arquitectura georgiana del siglo XI, se erige como un testimonio de este encuentro divino. Su importancia no solo está ligada a su significado histórico, sino también a su excepcional valor artístico, que lo distingue en la zona de Javakheti.
El monasterio, restablecido en 1989, con un convento añadido en 1992, continúa resonando con la armonía de la adoración y la vida diaria. Las monjas residentes no solo mantienen la esencia espiritual del lugar, sino que también elaboran quesos exquisitos, chocolate y otros dulces que los visitantes pueden saborear y llevar a casa como deliciosos recuerdos de su visita.
El monasterio, adornado con puertas y ventanas ornamentadas, es una joya arquitectónica. A pesar de las devastaciones del tiempo, conserva fragmentos de antiguas obras de arte en su interior. Su habilidad técnica y valor artístico lo sitúan entre los monumentos más destacados de Javakheti.
Hoy, la iglesia restaurada se erige con orgullo, su fachada oriental mirando hacia el lugar donde Santa Nino puso por primera vez un pie en Georgia. Aquí, un modesto obelisco de piedra conmemora su contacto inicial con la tierra que cambiaría para siempre.
El Convento de Poka San Nino no es solo un lugar de adoración; también es un centro de actividades comunitarias. Las monjas operan una escuela parroquial, enseñan a los niños locales diversas materias y ofrecen tratamientos médicos gratuitos a los lugareños. Su taller de esmalte, "Pokani", produce hermosos artículos litúrgicos e íconos, infundiendo lo espiritual en la vida diaria del monasterio.
El monasterio celebra su festividad el 1/19 de junio, marcando el día en que Santa Nino entró en Georgia. Visitar el Monasterio de Poka San Nino es un viaje al corazón de la herencia cristiana de Georgia, un paso atrás en el tiempo y una oportunidad para presenciar la fe viva de su pueblo.