¿Alguna vez has soñado con caminar por humedales verdes, con una sinfonía de cantos de aves en el aire, con la libertad de detenerte para un paseo a caballo espontáneo o una escapada de pesca? ¡Ese sueño puede hacerse realidad en la Reserva de Humedales de Sulda! Ubicada cerca de las aldeas de Bozali y Sulda en el municipio de Akhalkalaki en Georgia, este oasis protegido cuenta con un único humedal pantanoso situado a 2000 metros sobre el nivel del mar. ¡Hablemos de un refugio en altitud!
La Reserva de Sulda forma parte de la extensa red de Áreas Protegidas de Javakheti, que se encuentra junto a lugares como el Parque Nacional Javakheti y un cuarteto de otras reservas protegidas. Este conjunto de zonas de conservación ha llamado la atención de las autoridades de la Lista Ramsar, colocando a Sulda como un candidato potencial para una futura inclusión.
¿Te gusta hacer senderismo? La reserva cuenta con un sendero de 5 kilómetros que serpentea a través de impresionantes humedales. El recorrido comienza en el edificio de administración de las Áreas Protegidas de Javakheti y se dirige hacia la frontera de Georgia con Turquía. En el camino, pasa por la encantadora aldea de Miasnikiani, culminando en los idílicos Humedales de Sulda. ¿Y la mejor parte? ¡Puedes regresar sobre tus pasos y revivir las vistas escénicas en tu camino de vuelta!
Pero Sulda no es solo para los entusiastas del senderismo. Si eres un aficionado a la observación de aves, ¡estás de suerte! La reserva sirve como un santuario para una variedad de aves acuáticas, particularmente durante las bulliciosas migraciones de primavera y otoño. Podrías avistar pelícanos dálmatas, pelícanos blancos, cigüeñas blancas y negras, garzas grandes, patos de superficie, rascadores, focha eurasiática, numerosas especies de garzas y varias variedades de gaviotas y gorriones. ¡Asegúrate de llevar tus binoculares!
Después de un día de exploración, puedes relajarte con un poco de equitación o pesca en la represa de la reserva. A medida que el sol se pone, dirígete a la cercana aldea de Sulda, donde te esperan alojamientos familiares. Abraza la famosa hospitalidad mesquetiana y disfruta de un merecido descanso en esta pintoresca aldea de montaña.
En resumen, la Reserva de Humedales de Sulda promete una encantadora mezcla de encuentros con la vida silvestre, actividades al aire libre y cálida hospitalidad georgiana, todo enmarcado en el contexto de un humedal en altitud. ¡Es un paraíso para los amantes de la naturaleza que espera ser descubierto!