El Monte Shkhara, ubicado en la frontera entre Georgia y Kabardino-Balkaria en la Federación Rusa, reina supremo como la cima de los picos georgianos. Con una altitud de 5,203 metros, Shkhara es el punto más alto de Georgia y el tercero más alto en la Cordillera del Cáucaso Mayor, superado solo por Dykh-Tau y Elbrus.
Los desafíos que presenta el terreno del Monte Shkhara son tanto atractivos como intimidantes para los montañeros de todo el mundo. Su paisaje es una serie de grietas escarpadas, rocas traicioneras, pendientes empinadas y crestas afiladas. Sin rutas de dificultad media, este pico de 5,203 metros atrae solo a aquellos escaladores con las habilidades más avanzadas, ganándose su reputación como una de las cumbres más exigentes de Georgia.
Su majestuoso entorno, enclavado entre el glaciar Bezengi al norte y el glaciar Shkhara al sur, realza aún más el atractivo de la montaña. Shkhara forma parte del macizo de la Muralla Bezengi, una cresta extensa que se extiende alrededor de 11-12 kilómetros y ofrece algunas de las expediciones más exigentes de Europa.
Shkhara, una montaña de nueve cumbres, cada pico un testimonio de su grandeza, proporciona hasta 10 rutas de los niveles de dificultad más altos para los escaladores. Entre estas se encuentra la ruta "Beqnu", nombrada en honor al escalador georgiano Beqnu Khergiani. Esta ruta combinada exige competencia en escalada en roca, trabajo con cuerdas y una óptima condición física.
La montaña ha sido escenario de numerosas escaladas significativas a lo largo de la historia. La primera ascensión exitosa fue realizada por un equipo británico en 1888. En 1969, escaladores georgianos lograron una notable travesía de la Muralla Bezengi. Tan recientemente como en 2019, escaladores georgianos hicieron historia con la primera ascensión invernal de Shkhara.
La conquista del Monte Shkhara tiene un inmenso prestigio en los círculos de montañismo. Más que un pico, es un emblema de la esplendor natural de Georgia y un emocionante desafío para aventureros de todo el mundo.